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Asociación Cultural Abvla de Abla

Pedro Reyes convierte armas en instrumentos músicales

El artista mexicano Pedro Reyes comprometido por la lucha contra la violencia de la Ciudad de Juárez, donde la lucha entre los cárteles de la droga ha provocado en seis años más de 10.500 asesinatos exhibe en galerías de arte de todo el mundo el proyecto “Disarm“, que el artista mexicano ha creado para convertir 6.700 armas de fuego en artefactos de música. Son pistolas, ametralladoras, rifles de asalto, lanza granadas… que mediante el reciclaje se han transformado en guitarras, violines, flautas y xilófonos. Un ejemplo de “el arte de reciclar” que suena, muy, muy bien.

Inspirado en el proyecto que comenzó en 2007 llamado “Palas por Pistolas” en la ciudad de Culiacán (cuna del cartel de narcos más importante de México), recicló 1.500 armas, cedidas por las autoridades, en el mismo número de palas para sembrar la misma cantidad de árboles. De este modo Reyes transformó estos instrumentos de odio y muerte en instrumentos literales, y de esta manera, ayudar que proporcionen la vida a través de la música, en lugar de quitarla.

 

Un par de años más tarde recibió una llamada del ejército mexicano que le ofrecía miles de armas decomisadas a los narcos de la droga, en una de las ciudades más violentas de México (Ciudad de Juárez) para desarrollar una obra de arte. El también escultor sólo pudo pensar en una opción: de los cañones que significaron muerte en Ciudad Juárez ahora saldría música.

De la mano de herreros y músicos construyó instrumentos de viento, cuerdas y percusiones, para celebrar un concierto el pasado octubre, en el que varios artistas tocaron los nuevos artefactos e interpretaron Imagine, de John Lennon, para entregar el mensaje del artista sobre que la cultura es la mejor medicina contra la violencia. Debido a la popularidad que ha tenido esta iniciativa, sigue con la rueda de conciertos. El último ha sido el pasado agosto en la inauguración de la muestra internacional de arte contemporáneo Visible Invisibilización, en Quétaro, México.

Además se han presentado su obra reciclada en las galerías de arte de Londres, Turquía, Corea del Sur, y pasará por Australia, Japón y Estados Unidos. El recorrido, asegura Reyes, no es sólo para mostrar que existe un problema de violencia asociado con la venta de armas, sino también con la silenciosa y millonaria industria armamentística. “Normalmente sólo oímos de la armas cuando se usan y ese es el lado visible de la violencia, pero el lado invisible es donde las armas se producen. Creo que tenemos que desarrollar una cultura de rechazo a la industria de las armas.”, afirma.

 

Fuente: www.concienciaeco.com

 

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